La hibridación entre el arte y la moda es una forma para el consumidor de poder vestir piezas de arte y definir su estilo como único, cada vez más marcas de moda deciden implementar este concepto mediante colaboraciones con artistas.
Desde Loewe, apuestan por lanzar una nueva colaboración con Studio Ghibli.
Jonathan Anderson contextualiza la colección en la actualidad diciendo que “hay un anhelo natural de sentimientos reconfortantes en este momento” declara que Mi Vecino Totoro es en la película en la que piensa cuando necesita encontrar un sentimiento apaciguador.
Y es que el momento histórico que estamos viviendo es un momento de innegable caos en el que se agradece cualquier atisbo de alegría que nos quite este sabor de boca.
En la película todo respira un halo de calma y familiaridad, algo hogareño, en parte gracias a los paisajes y al lugar en el que está ambientado.
Esta colección es todo un sueño para los amantes del anime y la moda.
La colección está compuesta por sudaderas con capucha y camisetas de algodón estampadas, chaquetas de cuero pintadas a mano, jersey de punto con los paisajes de la película, sus icónicos accesorios de cuero y algunos de sus bolsos más icónicos elaborados artesanalmente con los dibujos de Totoro. La marca se mantiene fiel a sus métodos por lo que los elementos de la colección están fabricados artesanalmente y con materiales de alta calidad.
En la actualidad con la situación que estamos viviendo hemos tomado conciencia más que nunca de la vida útil de las prendas que utilizamos y de que nuestro consumo ético y responsable es crucial para la salud del entorno en el que vivimos, por eso creemos que es importante tener prendas que nos representen también en este sentido, de marcas que inviertan en sostenibilidad. De esta manera invertiremos en prendas de calidad que tendrán un ciclo de vida mucho más largo.
Los creadores de esta compañía deciden tomar el camino de la animación tradicional, esto requiere que cada fotograba individual sea pintado a mano y lleve mucho tiempo de antelación planear cada película, teniendo esto en cuenta la colaboración surgió de un amor mutuo por las técnicas artesanales y un enfoque mutuo en la naturaleza y su importancia para la humanidad.
La manera en la que Loewe realiza cada producto se podría comparar con como en Studio Ghibli realizan las películas, pintando a mano artesanalmente cada una de las piezas y tomando el tiempo que lleva realizar cada una para conseguir la máxima calidad.
En cuanto a la campaña, fue fotografiada por Gray Sorrenti, hija de Barrio Sorrenti, el conocido fotógrafo de moda. La campaña respira fantasía por todas partes y es muy coherente con la conexión con la naturaleza de la que hablábamos anteriormente. Han creado unos collages con las imágenes mezcladas con dibujos creando un efecto visual divertido pero que, a la vez, gracias al entorno transmite serenidad.